La industria de los videojuegos


La Universidad Santo Tomás es parte de Codeproval, y compartimos la columna de la Vicerrectora Laura Bertolotto, que se refiere al evento Ludópolis y a industrias creativas.

Este viernes y hoy sábado se está desarrollando, de manera virtual, la segunda versión de Ludópolis, evento que surge como una iniciativa de la carrera Diseño de Videojuegos de Santo Tomás Valdivia, para fomentar desde la academia la formación de un polo económico en torno a las industrias creativas y el desarrollo tecnológico, con foco en educación y la transferencia tecnológica hacia otros sectores del ámbito productivo de Los Ríos.

 El evento, que cuenta con el financiamiento Fomento Los Ríos a través del Programa de Apoyo al Entorno innovador (PAEI), contempló la realización de charlas, talleres, rueda de negocios, un concurso de desarrollo de videojuegos, y permite además conocer el “estado del arte” en que se encuentra esta industria a nivel local, los desafios, y las oportunidades y proyecciones que se ofrecen a nivel mundial.

En este sentido, debernos señalar que la industria de los videojuegos ha sido afectada por la crisis económica derivada del COVID-19. Sin embargo, el impacto será menor y finalmente saldrá fortalecida dado que, como manifiestan distintos especialistas, el confinamiento ha permitido un aumento de tiempo y personas dedicadas a esta actividad.

 No obstante, el crecimiento de esta industria no es un fenómeno nuevo, ya en 2018 la consultora de estudios de mercado IBISWorld, proyectaba un alza de más de 10% para el año pasado, convirtiéndola en la primera industria cultural del planeta con ingresos sobre los 135 mil millones de euros.

 Todo este desarrollo, demanda de manera paralela, la formación de capital humano altamente capacitado. En esa línea, en el “Libro Blanco del Desarrollo Español de Videojuegos 2017”, editado por la Asociación Española de Desarrollo de Videojuegos, explican los desafíos de dicha industria a nivel de dicho país, dando cuenta de la necesidad de contar con Diseñadores, probadores, desarrolladores de software y programadores, ingenieros de audio, artistas y animadores, guionistas, traductores y marketing.

 En este contexto, y luego de haber vivido la segunda versión de Ludopolis, es importante entender, que esta industria está lejos del clásico estereotipo del “joven gamer” (usuario); y hoy la debemos vincular con la del profesional que crea a través de la tecnología y que ha permitido transformar a los videojuegos en uno polo desarrollo económico y en el cual debe estar presente nuestra Región de Los Ríos.